¿Y si te hago unas fotos en mi casa?
No se conocían de nada, pero parece que ambos tenían como hobby la misma afición, que era la de realizar fotografías. Tras un rato hablando comenzó a hacerle fotos a la jovencita, la cual parecía más que encantada. Lo cierto es que era bastante bella, y cuando el chico le propuso hacerle fotos en su casa la zorrita aceptó. Pero claro, quería hacerle fotos desnuda. Una vez allí empezó a desnudarla y mientras se abría de piernas le sacaba las primeras fotos. Como te imaginarás no era más que una excusa para poder follarse a aquella guarrilla, por lo que dejó la cámara a un lado y comenzó a comerse su coño. Al poco se la estaba follando, como disfrutaba la muy puta.