Te prometo que nadie se enterará de lo nuestro hermanita
Estar solos en casa hizo que a ambos se le despertaran ideas. Sentados uno junto al otro en el sofá el chico no tardó mucho en hacerle ver a su hermana cuales eran sus intenciones, que por supuesto eran claramente sexuales. Mientras se acercaba a ella para besarla le prometía que ese sería su secreto y que nadie se enteraría jamás de eso, algo completamente falso por supuesto. Comenzó a quitarle toda su ropa, ella se dejó por supuesto, lo deseaba. Una vez los dos estaban desnudos la zorra comenzó a comerle el rabo, algo que sin duda él esperaba. Un poco después el chico la estaba penetrando mientras ella disfrutaba de su polla. Nunca habían pensado que eso sucedería, pero una vez ocurrió se dieron cuenta de que era lo mejor que les había pasado en su vida. Tras un buen rato follando el muchacho no pudo aguantar más y acabó corriéndose sobre el vientre de su hermana, la cual aun seguía mirándole con cara de deseo.