Sus dos grandes pasiones son el sexo y la comida
Bienvenidos puritanas y puritanos a este inusual espectaculo porno alimenticio con el que un matrimonio ha sabido sacar partido de sus dos mayores pasiones: el sexo duro y la alimentación. Durante estos 5 tensos minutos no paran de escucharse flashes de cámaras fotográficas, si viéndolo desde una silla en casa ya te pone los pelos de punta no quiero ni imaginar lo que se sentirá estando presente. Por lo único que me ha echado un poco para atrás el vídeo es porque la esposa parecía un pato cuando lo ceban con esa práctica tan brutal y me dan mucha lástima los animales indefensos, no así las personas que lo hacen por voluntad propia y con mucho gusto.