Skye West, una agente inmobiliaria manteniendo relaciones sexuales con los clientes
Desde que obtuvo su licencia de agente de bienes raíces, Skye West no logra vender ninguna propiedad ni aunque la regalen La agencia donde trabaja no goza de buen prestigio y es difícil encontrar compradores interesados, ya que las propiedades en venta no tienen mucho valor Consciente de que necesita hacer un esfuerzo adicional para convencer a los clientes, Skye ha adoptado una estrategia peculiar: después de mostrarles la propiedad, se desnuda y se arrodilla para practicar sexo oral y persuadirlos a firmar el contrato de compra Esta técnica parece surtir efecto, ya que ahora vende casas sin parar y atrae a muchos maridos infieles que buscan sus servicios