¿Qué hacemos con nuestro padre?
Las insinuaciones de su madrastra se volvieron cada vez más obvias, lo cual llevó a una conversación mientras compartían una copa A pesar de preocuparse por su padre, la madrastra continuaba tocando las piernas de él Intentó abrazarlo, y se acurrucó en sus pechos, lo que lo excitó aún más Comenzaron a besarse y pronto él estaba disfrutando de sus pechos mientras ella gemía de excitación Después, la tumbó y se dedicó a estimular su entrepierna, notando lo mojada que estaba Se trasladaron al sofá, donde su madrastra tomó la iniciativa y se colocó encima suyo para tener relaciones sexuales Fue una experiencia inolvidable para ambos, deseando repetirla mientras seguían en la actividad, sin pensar en el padre en absoluto