pues era cierto, tenias la polla como mi brazo
El Africano no tenía ninguna necesidad de mentirle, ya le avisó que a simple vista creia su polla era igual de grande que su brazo. Hay mucho bocazas que presume de rabo grande y a la hora de la verdad se queda en nada, pero no, la chica no daba crédito al pollón que tenía delante y aunque intentaba quitárselo de la cabeza para ira al tema, de vez en cuando volvía a reirse alucinada por el impresionante tamaño del miembro que se estaba tragando por la boca y que luego iria directo a fusilar su coño.