Profesoras de piano que se meten toda la mano
Os ponen cachondos las profesoras, a qué sí, aunque sean de piano. Bueno, ya veréis esta morena cómo le gusta que la miren. Iba a dar una clase de música, pero se acabó metiendo los deditos y toda la mano. Estaba tan caliente que la única música que sabía hacer era a través de su conejo cantarín, deseoso de que roces y tocamientos, y aunque con la mano se bastaba y se sobraba, al final agarró también un dildo de gran tamaño para terminar de correrse en el banco del piano.