No se si estás a la altura para follar conmigo
No solo era una mujer de un alto nivel económico, también era una putita bastante atractiva. Nada más llegar a su bonita casa se le acercó el chico que tenía a su servicio y le abrió la puerta de su coche de lujo. Ella al verlo de cerca comenzó a tener ciertos pensamientos, le agarró de la mano y le dijo que entrara en su casa. El muchacho por supuesto lo hizo, aunque no entendía bien lo que pretendía pues era una mujer casada. Pero pronto lo descubrió en cuanto la zorra le mostró las tetas preguntándole que le parecían. Por supuesto eran perfectas, tenía dos buenos melones y no tardó en lamérselos. Se fueron al sofá y continuaron con aquello, estaba claro que la cosa acabaría en una buena follada. El muchacho le comió su coño mientras ella gozaba, le gustaban los tíos jovencitos. Acabaron totalmente desnudos y el chico la penetró. La madurita disfrutaba mucho más que con la polla de su marido, de eso no cabe duda. Y al final para demostrarle que si le gustaban sus tetazas acabó corriéndose sobre ellas.