Mora velluda se auto-complace muy excitada
Aquella mujer con vello sin afeitar en absoluto se despertó excitada esa mañana Sin quitarse la ropa sugerente que apenas cubría su cuerpo, comenzó a retorcerse en la cama, acariciando su pubis y su clítoris con una intensidad que despertaría la pasión en cualquiera La mujer de origen árabe lucía espectacular, con unos senos increíbles que ella misma se acariciaba para su propio placer Con los ojos cerrados, se sumergió en un aura de sensualidad, introduciendo sus dedos en su buceta, acariciando su vello púbico y llevándose lentamente hacia un orgasmo que era un placer de presenciar