Melissa Lynn pone los cuernos con dos negros polludos
El marido de Melissa Lynn tiene algunos problemillas en la cama y sabe que esta hembra tiene unas necesidades fuera de lo común, es muy zorra y necesita follar a diario y dar rienda suelta a sus deseos más ocultos, y por eso ha aceptado a que vengan a casa estos dos negros polludos para follársela delante de sus narices. A Melissa la situación al principio le resulta incómoda, pero al ver la buena reacción de su hombre, pues se dedica a disfrutar de esas dos vergas, acariciándolas, chupándolas y sobre todo metiéndoselas por el coño tantas veces como puede hasta hacer que se corran copiosamente sobre su cara.