las dos facetas de un instructor de manejo
¿Alguien ha considerado que detrás de un instructor de autoescuela hay un individuo que siente y se excita como cualquier hombre y que se pone nervioso cuando una de sus alumnas se presenta con una falda tan corta que se le pueden ver las braguitas rosas? Vamos, hay que ser muy ingenuo o ingenua Hoy analizaremos las dos facetas de uno de estos profesionales que generalmente se limitan a tener las manos muy largas y apretar los muslos de las chicas para que aceleren bajo la excusa de que deben ir un poco más rápido; en su clase práctica experimentarán un pequeño contratiempo que afortunadamente se resolverá de manera amistosa, esta vez la suerte estuvo de su lado