La psicóloga sensual
Jaime, a pesar de sus dudas iniciales, decidió finalmente acudir a una psicóloga para desahogarse y contar sus problemas Su amigo le había recomendado a una profesional muy competente y amable Aunque le pareció curioso lo de “complaciente”, confió en la sugerencia de su amigo y concertó una cita para ese mismo día Jaime no imaginaba lo que esa visita cambiaría en su vida sexual Al entrar en la consulta, se sorprendió al ver a una atractiva mujer, vestida de forma elegante y con un toque sexy e intelectual Samantha, psicóloga y sexóloga especializada, se presentó ante él A pesar de no creer tener problemas con su sexualidad, Jaime se sintió cómodo con ella desde el principio y se tumbó en el diván para empezar la sesión Samantha inició la conversación preguntándole sobre diferentes aspectos de su vida Jaime respondía sinceramente, pero no podía evitar distraerse con el escote de Samantha La tensión sexual se palpaba en el ambiente Ante la situación, Samantha propuso desnudarse ambos para igualar las condiciones y Jaime aceptó Mientras se desnudaban, Jaime no podía evitar mirar el sensual cuerpo de Samantha Una vez en ropa interior, Samantha notó la excitación de Jaime y sugirió poner en práctica lo que estaban hablando Sin dudarlo, se lanzaron a una intensa interacción física, disfrutando de cada momento con pasión desenfrenada Tras un encuentro apasionado en el diván, ambos llegaron al clímax en un momento de éxtasis y lujuria Al finalizar, Samantha anunció que el tiempo de la sesión había terminado, esperando con impaciencia la próxima cita con Jaime