La niña estaba muy ansiosa
Estaba completamente enamorada de mí, era evidente en la forma en que me miraba Aquel día me disponía a tener relaciones íntimas con ella, así que comencé a quitarle la ropa lentamente, acariciándola, pero ni siquiera se movió Al poco tiempo, abrió sus piernas para que le hiciera sexo oral y lo hice con entusiasmo Más tarde, fue ella quien me ofreció una magnífica felación Ambos estábamos preparados para la acción, por lo que decidí ponerla a cuatro patas y empezar a penetrarla como una fiera Luego, la joven se colocó sobre mí y comenzó a cabalgar con intensidad, demostrando lo excitada que estaba Terminé de pie en la cama, derramando mi semen en su boca mientras ella seguía lamiéndomela Cuando una chica está enamorada, todo es posible