Cuando una madre se entrega lo da todo
No es fácil que una madre se entregue por completo a su hijo, pero ella sucumbió y por supuesto puso todo de su parte para que aquello fuera inolvidable para ambos. Ella era una de esas maduritas cuarentonas que todavía siguen teniendo un físico espectacular a sus 43 años, el muchacho tenía 24 y muchas ganas de probar lo que podría ser su primera vez con su madre. Mientras ambos estaban cómodamente hablando el joven no hacía más que acercarse a ella, hasta que finalmente se tiró encima para besarla. Al principio la mujer se quedó un poco en shock, se revolvió y parecía que no quería. Pero pronto decidió entregarse a su hijo y ser suya aunque solo fuera por una vez. Comenzaron a besarse y el jovencito rápidamente la fue desnudando, parecía ansioso como si no quisiera darle tiempo para que se arrepintiera de aquello. Una vez desnuda le comió el coño para excitarla un poco más si cabe, y después la penetró. Fue sin duda una follada espectacular en la que su madre demostró que todavía era una mujer muy activa sexualmente y que podía satisfacer a cualquier hombre, por joven que fuera.