cuando tu madrastra te la pone dura
Todos somos libres de escoger a la pareja que nos de la gana, pero es cuanto menos una imprudencia echarte una novia de treinta y tantos años cuando tu hijo tiene ya 25, quieras o no quieras el chico será una competencia para ti y no es de extrañar que en un momento de calentón se fije en ella. Hoy en día existe otro handicap y es el del alto nivel de paro que hay entre los jóvenes; han terminado sus estudios, no encuentran trabajo y pasan muchas horas en casa mientras tú tienes que trabajar de sol a sol para poder mantener a la familia, por lo que no es tan difícil que el día menos pensado se follen a tu mujer mientras tú estás rompiéndote los cuernos como un cabrón para llevar un plato de sopa caliente a casa…