Comiendo la prostituta de la madre de mi amigo
Sabía que mi amigo era el mejor santo, pero cuando fui a su casa su madre siempre me golpeaba tuve que traicionar la confianza de mi amigo porque no pude resistir que me volviera loca con esas tetas calientes que sólo ella sabía cómo mostrar, hice todo bien para que mi amigo no se enterara del desastre que tenía porque Nunca me perdonaría, pero terminé haciendo un video de la prostituta de su madre sentada en mi polla en la cocina.