Comestibles de la vulva muy deliciosos
Siempre he disfrutado brindando placer oral a las mujeres que comparten mi cama Sentir la calidez y humedad de su intimidad cerca de mis labios me enloquece, teniendo la libertad de explorarla a mi antojo Es gratificante estimularla adecuadamente, centrándome en el clítoris y observando cómo la mujer se deleita con cada caricia entre sus piernas Después de varios días de abstinencia, decidí buscar un encuentro apasionado aquella noche Pronto encontré a una mujer dispuesta a disfrutar junto a mí Nos dirigimos a mi hogar para saciar nuestra lujuria sin perder tiempo Desnudos, nos entregamos a la pasión sin restricciones Cumpliendo mi promesa, me sumergí entre sus piernas para ofrecerle un placer inigualable Sus gemidos revelaban su deleite, provocando un éxtasis cada vez que estimulaba sus zonas erógenas Disfrutaba tanto de su placer que no pude contenerme y me dejé llevar por el mío Mientras alcanzaba múltiples orgasmos, demostré que no era necesario la penetración para proporcionarle placer supremo Saborear su flujo buceta me deleitaba, sintiendo su calor contra mi rostro Sorpresivamente, se abalanzó hacia mi miembro, complaciéndome con una intensa felación Quería reciprocar el placer recibido, y yo no puse resistencia alguna Agradecí el gesto y disfruté al máximo de su habilidad oral Demostró ser una experta en el sexo oral, brindándome un placer excepcional Al punto de la eyaculación, me avisó pero continuó estimulándome, decidida a llevar el acto hasta el final Finalmente, alcancé el clímax, llenando su boca con mi esencia A pesar de no poder contener toda mi eyaculación, la imagen de su rostro cubierto de mi semen quedó grabada en mi mente, excitándome al recordarlo