Colombiana se pone las botas haciéndole mamadas a un pollón negro
Qué guarra esta rubia colombiana, menudas ganas tenía de comerle la polla a este negro y mirad cómo se puso para conseguirla, cachonda como una perra. Le agarró esa morcillaca negra y se la restregó por toda la cara. Así de dura, la verga era casi tan grande como su cabeza, y esta piba solo quería hacerle mamadas, saborear una polla negra como esa hasta que dejara de sentir la lengua o el tipo le avisase de que no podía más. Porque mira que cuando esta se pone a chuparla, lo hace bien, eh, ya lo veréis…
