Eres mi supervisor y sé que debo mantener relaciones íntimas contigo
La había contratado por su apariencia, era, sin duda, la jovencita más hermosa que había tenido la oportunidad de ver Sin embargo, a lo mejor por eso nunca consideró la posibilidad de que fuera tan promiscua Aquel día, se le acercó y le confesó abiertamente, sabía que como empleada él tenía ciertos privilegios como jefe, uno de los cuales era el poder tener intimidad con ellas Estaba preparada para brindarle su cuerpo y él no podía creerlo, su sorpresa era evidente en su rostro De todas formas, no tardó en comenzar con el sexo oral Posteriormente, ambos se despojaron de sus ropas y tuvieron relaciones sin interrupciones, la mujer indudablemente sabía cómo ser excitante para un hombre