pero señor, ¿esto no era un masaje?
¿Por qué crees que el índice de hombres que han empezado a estudiar para ser masajistas se ha incrementado considerablemente desde hace un par de años?, pues es evidente que han descubierto un filón en ésta profesión: se folla mogollón y casi a diario. Como siempre la supuesta ingenuidad de las clientas es fundamental para darle vidilla a esos momentos tan excitantes y cuando se quieren dar cuenta les están masajeando el coño con un vibrador, por supuesto ellas son las que dan el consentimiento para probar los nuevos productos.