en el barrio puede pasar cualquier cosa
¿Quién no recuerda con cariño y añoranza su barrio puritanos?, si las calles de nuestra ciudad hablasen, se podrían escribir libros interminables contando las anécdotas e historias que hemos vivido en ellas. Recuerdo que cada día era una aventura nueva ya que te podías juntar con 20 o 30 colegas y a cual de ellos más dispar, ni hablar de cuando llegaba una tía nueva a la peña y todos queríamos follárnosla. Hoy veremos una de esas tantas situaciones extrañas que suceden en el callejón de un barrio cualquiera con una guarra a la que no solo le encanta follarse a varios amigos a la vez, sino también hacerlo totalmente a pelo.