sobando a la masajista y su mujer sin enterarse
Estas es otra de tantas situaciones comprometidas que parecen un chiste pero que, afortunada o desafortunadamente y dependiendo de quien sea el infiel en cuestión, suceden. Aunque no esté bien hacer este tipo de cosas este tipo es un suertudo y dicho sea de paso un vicioso, el guarro se está tirando a la masajista de la familia y no se conforma con hacerlo en privado, el muy pervertido ha llegado al punto de follársela en presencia de su señora mientras la pobre, ajena a la situación, disfruta de un masaje y de un lubricante natural recién sacado de la polla de su marido.