Se folla a su vecinita en la cocina
Fue una de esas folladas entre jovencitos que tanto nos gusta ver, aunque más nos gustaría vivir. Ella era su vecina, solía pasar mucho tiempo en su casa puesto que en realidad ese chico le gustaba. Y finalmente ese día sucedió, él comenzó a desnudarla en casa y por fin pudo verla desnuda. Es cierto que tenía tetas pequeñas, pero no pareció importarle, era una chica de gran belleza y además muy puta. Empezó a comerle el rabo y poco después se la estaba follando mientras lo grababa, todo allí mismo en la cocina. La puso sobre la mesa del desayuno y se la folló, luego incluso de pie y sentado sobre la silla. Ese cabrón tenía aguante, y a la putita le encantaba. Finalmente se lo tiró en su cara mientras ella cerraba los ojos, como le gustaba ese chico.