Metiéndosela a esta bonita colegiala
Ella quería, por lo que fue fácil llevármela a mi casa con la intención de follármela. Empecé a tocarla, esa ropa de colegiala siempre me la ha puesto dura, ahora me la iba a follar. Tras tocarla un rato aparté sus braguitas, la coloqué a cuatro patas y le dije que iba a metérsela, eso fue lo que hice. Me la estaba follando a cuatro patas como a una perra, y me gustó tanto que quise hacerlo así todo el rato. Al final comencé a correrme pero no le dije nada, saqué mi rabo pero se lo volví a meter para acabar dentro de ella. Que chochito más rico tenía la puta de la colegiala.