Encuentro apasionado en la oficina de mi superior (Tercera entrega)
Estaba allí, aceptando la evidencia y teniendo sexo salvaje y arriesgado con mi jefe en su despacho Mi sueño erótico más recurrente se estaba convirtiendo en realidad de repente y apenas tenía tiempo para asimilar lo que estaba sucediendo tan rápido y sorprendente Ni en mis sueños más húmedos habría imaginado alguna vez que estaría teniendo relaciones sexuales con él en el lugar de trabajo Superaba todas las fantasías que había creado en mi mente y había imaginado escenas de sexo de mil maneras diferentes Sin embargo, la realidad superaba la ficción sin duda alguna Debo decir que su cuerpo desnudo era mucho mejor de lo que había imaginado Había recreado cada parte de su anatomía previamente, pero no me había dado cuenta de lo atractivo que era realmente debajo de esas camisas que llevaba a diario Sin duda, lucía aún mejor sin ropa Mi excitación comenzó a aumentar, preparándome para la diversión sexual que se avecinaba Ya no había marcha atrás ni posibilidad de arrepentimiento Lo que habíamos comenzado estaba hecho y lo mejor era terminarlo con éxito Después de tantos pensamientos lujuriosos hacia él, no podía dejar de llevarlos a la vida real Me abrí de piernas sobre su escritorio y permití que me poseyera como una zorra en celo Me dejé llevar por la situación, sin importarme si gemía demasiado alto Cualquiera podría entrar en cualquier momento y pillarnos en plena acción, pero en lugar de asustarme, eso me excitaba aún más Él sabía lo que sentía y jugó con ventaja, dándome uno de los mejores momentos sexuales que recordaría La mesa temblaba con cada movimiento de cadera al ritmo del placer A veces rápido, otras veces lento, pero siempre con la pasión que nos caracterizaba Mientras me embestía, sentía que llegaba a lo más profundo de mi ser Nos aferrábamos mutuamente mientras nos besábamos con la pasión del primer encuentro Sudorosos y exhaustos, debíamos darlo todo para culminar ese momento tan caliente como se merecía Él me avisó que estaba a punto de correrse A pesar de ello, seguí moviéndome queriendo que se dejara llevar dentro de mí Captó la indirecta de inmediato y ambos nos sumergimos en el más sublime de los placeres