El auditor se benefició de su situación
Era día de revisión y los datos que presentaba la mujer madura no coincidían, había un error Afortunadamente, el joven tenía una solución: hacer la vista gorda a cambio de favores sexuales Comenzó a acariciar a la mujer madura mientras esta mostraba sorpresa en su rostro, aunque sabía que debía dejarse llevar Él se atrevió a ir más allá, revelando sus senos grandes y perfectos para luego lamerlos y acariciarlos con destreza A pesar de su aparente resistencia, era evidente que no tenía otra opción más que seguir el juego La desnudó por completo, la azotó suavemente en sus nalgas y la penetró en el sofá Estaba tan excitado que decidió incluso practicar sexo anal, sabiendo que ella no podía negarse Al final del encuentro, el hombre eyaculó sobre ella como si su pene fuera una manguera descontrolada La mujer permaneció tendida en el sofá con lágrimas en los ojos mientras él se vestía; lo que habían hecho estaba mal, pero al menos la dejaría tranquila por un tiempo