Debes recompensarme con mayor remuneración por haber trabajado contigo
La joven había contratado a un hábil terapeuta para un masaje en su casa Preparó todo y se recostó, esperando disfrutar de un tratamiento profesional Sin embargo, cuando un hombre sabe cómo acariciar a una mujer, ella no tarda en excitarse, lo cual fue precisamente lo que le ocurrió Pronto comenzó a insinuarse, dejando ver su excitación No era la primera vez que el masajista experimentaba esta situación, así que se dedicó a satisfacer a la joven Mantuvieron relaciones en la camilla hasta que finalmente él eyaculó en su interior Al retirar su miembro, se podía observar cómo seguía goteando, como si fuera un río, fue una eyaculación abundante Con el servicio concluido, el masajista tuvo que cobrarle por el masaje y el encuentro sexual, algo que ella no se esperaba