Resulta imposible discutir con la hijastra de curvas pronunciadas
Hay individuos con quienes resulta difícil debatir, y existen principalmente dos razones que lo complican Uno es si la persona está cerrada a la posibilidad de admitir que se ha equivocado, independientemente de cuántas pruebas se le presenten Y la otra es si se siente una fuerte atracción por ella, lo que lleva a ceder ante sus argumentos aunque se sepa en el fondo que siempre esté equivocada, debido al poder de atracción sexual que ejerce y a la posibilidad de acceso íntimo Este es precisamente el predicamento en el que se encuentra el hombre con su hijastra, dado que ella ha constatado su obsesión por su atractivo físico, utilizándolo a su favor